Las claves del próximo reto de María Corina Machado luego de arrasar en las primarias opositoras de Venezuela
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Una fuente dijo a The Washington Post que el régimen de Maduro ha trazado un camino claro para todos los candidatos, incluida la inhabilitación de María Corina Machado, para fines de noviembre.
Redacción | Primer Informe
Los venezolanos nominaron el domingo a la líder de la oposición conservadora María Corina Machado para desafiar al autoritario dictador Nicolás Maduro en lo que su gobierno ha prometido que serán unas elecciones presidenciales competitivas y supervisadas internacionalmente el próximo año.
El próximo obstáculo que debe superar: una prohibición del gobierno que le impide postularse.
Machado, una ingeniero industrial de 56 años y exlegisladora, obtuvo una victoria abrumadora en las primeras primarias presidenciales de la oposición en más de una década para elegir un candidato único. Los informes iniciales sugirieron una participación inusualmente alta en una votación no oficial que no recibió apoyo del gobierno.
En un informe preliminar alrededor de la medianoche, con el 26 por ciento de los votos escrutados, la comisión interna encargada de los comicios dijo que Machado obtuvo el 93,13 por ciento de los sufragios, con un total de 552.430.
Machado, una crítica del gobierno desde hace mucho tiempo (una vez Hugo Chávez, el fundador del estado socialista de Venezuela, se burló de ella) ha sido inhabilitada para ocupar cargos públicos durante 15 años.
Pero en todo el país –y entre una diáspora de millones de personas en el extranjero, muchos de los cuales huyeron de la debilitada economía del país– había señales de esperanza. Los venezolanos esperaron horas en largas filas para emitir su voto.
María Victoria Ramos, de 23 años, esperó cuatro horas con su hijo de 6 años para votar en el municipio Libertador, al oeste de Caracas.
“Se puede ver en todas partes; La gente está decidida a poner fin a esto”, dijo. “Mi hijo sigue preguntándome por qué estamos aquí, esperando tantas horas, y yo solo le digo que esta es nuestra oportunidad de tener un mejor presidente. María Corina es esa persona”.
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Acuerdos de Barbados en la mesa de María Corina Machado
El gobierno y los líderes de la oposición acordaron la semana pasada los términos para las elecciones en la segunda mitad de 2024. La administración Biden recompensó al régimen al día siguiente al aliviar las sanciones contra las industrias de petróleo, gas y oro de Venezuela.
El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo que Estados Unidos había “transmitido nuestra expectativa y comprensión” de que antes de finales de noviembre, Maduro “definirá un cronograma y un proceso específicos para la reinstalación acelerada de todos” los candidatos en las próximas elecciones, incluidos “todos los que quieran postularse para presidente” el próximo año, en “igualdad de condiciones electorales”.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió una licencia general que autoriza a las empresas estadounidenses a realizar transacciones prohibidas desde hace mucho tiempo, principalmente en el sector energético controlado por el estado. La licencia tendrá una validez de seis meses y se renovará sólo si el gobierno socialista autoritario “cumple sus compromisos para las elecciones y con respecto a aquellos que han sido detenidos injustamente”.
En un acuerdo firmado el martes en Barbados, el gobierno de Maduro se comprometió a permitir que todos los partidos elijan a sus candidatos, otorgar a todas las campañas acceso justo a los medios y permitir que observadores internacionales supervisen la votación.
El gobierno no prometió levantar las prohibiciones impuestas a varios de los candidatos más populares de la oposición. Pero una persona familiarizada con las negociaciones, que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizada a discutir el asunto públicamente, dijo que el gobierno ha trazado un camino claro para todos los candidatos, incluido Machado, para fines de noviembre.
Si el gobierno no cumple, la licencia de petróleo y gas expirará en abril. Estados Unidos puede sacar una “tarjeta amarilla” antes de esa fecha, dijo la persona, y la “tarjeta roja” en abril.
La votación del domingo fue la primera desde 2012 en la que se eligió un candidato de la oposición por consenso. Ese año, Henrique Capriles fue elegido para desafiar al entonces presidente Chávez.
Capriles perdió ante Chávez en 2012 y ante Maduro en una elección especial después de la muerte de Chávez en 2013.
Antes de la votación del domingo, las encuestas mostraban a Machado liderando un campo de 10 candidatos, a pesar de su descalificación.
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Votación masiva que mete más presión
En la última década, más de siete millones de venezolanos (una cuarta parte de la población) han huido del hambre, la inseguridad y la represión oficial. Los venezolanos en el extranjero votan en 80 centros electorales en más de 20 países, “un bloque muy importante para decidir el resultado”, dijo David Smolansky, coordinador de la diáspora de Machado en Washington.
Las redes sociales estaban inundadas de videos de venezolanos de toda América Latina, América del Norte, Europa y Australia, algunos vestidos con abrigos o sombreros salpicados del rojo, amarillo y azul de la bandera nacional, esperando para emitir sus votos.
En Madrid, Delia Pérez, de 60 años, que abandonó Venezuela hace cinco años, dijo que la votación “la llenó de esperanza de que algún día Venezuela volverá a ser libre”.
“Hace apenas seis meses, el panorama en Venezuela parecía sombrío”, dijo Smolansky. “Estábamos afligidos y sin esperanza, pero hoy vemos una resurrección. Sabemos que el camino que tenemos por delante será desafiante, pero estamos dispuestos a afrontarlo”.
Después de su reinstalación, el próximo desafío de Machado sería unificar una oposición históricamente fracturada. Sus objetivos políticos, como privatizar la lucrativa industria petrolera estatal, se desvían más a la derecha que muchos en el movimiento. Si no puede inscribirse para las elecciones presidenciales del próximo año, otro candidato de la oposición podría insistir en reemplazarla.
“Después de ganar las primarias, Machado tiene todo el derecho a insistir en su candidatura”, dijo Geoff Ramsey, miembro del Atlantic Council, con sede en Washington, que se centra en Venezuela. “La cuestión es que es casi seguro que Maduro jugará sucio. Si finalmente no puede postularse, tendrá que trabajar con el resto de la oposición para encontrar una alternativa realista”.
La dictadura de Maduro desestimó la votación del domingo como un fraude.
“¿Quién les va a creer? ¿De dónde van a sacar credibilidad?” preguntó el legislador y exvicepresidente Diosdado Cabello, una de las personas más influyentes del régimen, durante su programa semanal de televisión. “Son mentirosos, manipulan, no les importa nada. Ya tenemos los resultados”.
David Smilde, sociólogo de la Universidad de Tulane que estudia Venezuela, dijo que, dados los desafíos logísticos y políticos que enfrentó la votación, fue un éxito.
“Más allá de la participación, el proceso de primarias ha hecho lo que deberían hacer las primarias: obligar a los políticos a acercarse a la gente, generar entusiasmo e impulsar el cambio”, dijo. “Este proceso ha hecho todas esas cosas y ha reavivado una oposición que hace apenas un año parecía estar en hibernación”.
Informe de The Washington Post.
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