PDVSA elaboró un plan ambicioso y secreto para levantar su producción
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Urgido por reanudar la producción petrolera, el régimen de Nicolás Maduro lanza una arriesgada propuesta para atraer inversionistas a la desmantelada industria de los hidrocarburos en Venezuela.
Humberto Andrade | Primer Informe
Con base en la llamada «ley antibloqueo», PDVSA trazó un plan de negocios para lograr levantar su producción petrolera la cual se encuentra en mínimos históricos.
La iniciativa, ideada por la Vicepresidencia de Planificación e Ingeniería, plantea condiciones confidenciales para lograr atraer capital privado nacional y extranjero, informó el portal Petroguía. La inversión, de acuerdo con los planificadores, permitiría alcanzar un volumen de producción de crudo de 1,8 millones de barriles diarios en diciembre de 2021.
La mitad de ese petróleo saldría de la faja del Orinoco. El plan también contempla la recuperación de las refinerías, reducir el venteo de gas natural y mejorar la distribución de combustibles.
Con su propuesta, PDVSA persigue la ambiciosa meta de recaudar fondos por el orden de los 76.740 millones de dólares.
La mayor parte de esos recursos irían a la exploración y producción. Esas actividades acapararían un 90,2% de los fondos que se quieren recolectar. Es decir, alrededor de 69.269 millones de dólares.
Solamente, las empresas mixtas existentes requieren casi 46.000 millones de dólares.
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Improvisado plan
De acuerdo al documento que se presentó el pasado mes de febrero, la producción en marzo debió estar en 752.000 barriles diarios y en abril debía estar por el orden de 906.000 barriles diarios.
Aunque las exportaciones de crudo se han estabilizado con un ligero incremento, eso se ha logrado con el agotamiento de inventarios existentes de petróleo. PDVSA estaría por reiniciar dos de sus cuatro mejoradores. Eso le permitiría reponer las existencias de crudo Merey y de crudos mejorados para exportar.
Los mejoradores tienen la capacidad de convertir más de 600 mil bpd de crudo extrapesado de la Faja del Orinoco en tipos exportables. Si PDVSA estabiliza estas operaciones, se podría permitir impulsar la producción de la Faja Petrolífera del Orinoco.
Negociaciones secretas
De acuerdo con el plan propuesto por PDVSA, las empresas privadas que se sumen a invertir en la estatal deberán suscribir una carta de intención, un memorando de entendimiento con PDVSA y un acuerdo de confidencialidad.
Eso los frenaría de informar sobre los montos que se vayan a desembolsar así como las modalidades del acuerdo o el esquema de negocio con el que participará con PDVSA.
El secretismo es necesario para proteger a los inversionistas que se aventuren a llevar su dinero a PDVSA. La empresa está vinculada constantemente a un gran número de actividades ilegales en el mundo.
La estatal también delegaría funciones que le son exclusivas en terceros a través de convenios operativos similares a los que se aplicaron en la década de 1990. En este aspecto las necesidades de financiamiento son de 12.414 millones de dólares.
El desarrollo del gas natural también forma parte de los proyectos aguas arriba por un monto por el orden de 11.270 millones de dólares. El monto incluye tanto la explotación en tierra firme como en costa afuera.
El financiamiento también abarca las actividades exploratorias y el inicio de la producción del área Dragón en la frontera con Trinidad y Tobago.
Con información de Petroguía.
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