EE.UU. dice que sanciones no prohiben transferir carga del Nabarima ni su reparación
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Ahora queda pendiente la autorización de PDVSA para la transferencia del crudo a manos de Eni.
Redacción | Primer Informe
La italiana Eni obtuvo garantías de que el gobierno de los EE.UU. no activará las sanciones en la transferencia de crudo venezolano del buque de almacenamiento Nabarima, que se encuentra deteriorado y con un alto riesgo de derrame.
Ahora el plan de la compañía para transbordar el crudo Corocoro desde la unidad flotante de almacenamiento y descarga (FSO) de Nabarima aún depende de la aprobación del operador de empresa conjunta PetroSucre, la estatal venezolana Pdv.
«El plan de Eni para descargar de manera segura el FSO de Nabarima recibió el jueves 29 de octubre luz verde de las autoridades estadounidenses, confirmando que la política de sanciones actual no impide que la empresa descargue la carga y repare el buque. La empresa podrá proceder una vez que PdVSA apruebe su plan», dijo Eni a última hora de ayer.
Pdvsa ya ha comenzado a transferir el petróleo mediante un proceso lento y precario basado en barcazas. No quedó claro de inmediato qué parte de los 1,3 millones de barriles de crudo queda a bordo del buque.
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El miércoles 21 PDVSA inició la descarga gradual del Nabarima transfiriendo el petróleo a una barcaza con capacidad para 30,000 barriles y luego al buque Ícaro que tiene capacidad para 700.000 barriles. Este último fue sancionado por el gobierno de los Estados Unidos en el año 2019. Luego que la embarcación receptora haya recibido el crudo este sería almacenado en tierra firme, aunque aún se desconoce dónde pues informes relatan que PDVSA tiene todos sus depósitos al límite.
La empresa venezolana no se ha pronunciado sobre el plan de transbordo de Eni.
El Nabarima comenzó a inclinarse alrededor de agosto, lo que generó preocupaciones sobre un posible derrame de petróleo en el poco profundo Golfo de Paria entre Venezuela y la cercana Trinidad y Tobago.
Esta unidad flotante de almacenamiento y descarga (FSO) viene siendo operado desde hace 10 años en el Campo Corocoro operado por PDVSA y con la participación del 26% de la petrolera italiana ENI.
Con información de Argus.
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